Virgo es uno de los tres signos del elemento Tierra y posee cualidades sumamente positivas como su gran inteligencia, su profesionalismo y su espíritu de superación. Pero también, como todas las personas, posee defectos, aspectos de su personalidad que debería mejorar. A continuación te contaremos en detalle cuáles son los principales defectos y las mayores virtudes de los nativos del signo de Virgo.
Lo mejor y lo peor del signo Virgo
Como cualidades positivas de Virgo podemos destacar las siguientes:
Profesionalismo: Los nativos de Virgo conocen una sola manera de hacer las cosas: De forma impecable. Son personas inteligentes, trabajadoras y que destacan por naturaleza en todo lo que hacen. Estas características los llevan a liderar los proyectos que encaran y a convertirse en referentes de sus colegas y compañeros de trabajo.
Lógica, sentido común e inteligencia: Cualquier problema, por complejo que sea tiene solución para un nativo de Virgo. Además de ser sumamente inteligentes tienen los pies bien firmes en Tierra y son especialistas en resolver situaciones complicadas de la forma más práctica y eficiente.
Serviciales y atentos: Virgo posee la cualidad de saber tratar con respeto y consideración a los demás y por eso agrada naturalmente a todos. Son personas que saben interpretar las necesidades y demandas de su entorno y estarán bien dispuestas para ayudar siempre que tengan la posibilidad. Tener un amigo o compañero de Virgo es garantía de comprensión y compañía en los momentos más difíciles.
Lo peor del signo de Virgo en cambio es lo siguiente:
Críticos y algo pesimistas: La objetividad de Virgo suele rozar la negatividad cuando analizan todo al extremo y ponen el foco en lo que podría salir mal. Son sumamente críticos consigo mismos y con los demás y esta actitud puede resultar hostil e incómoda para quienes los rodean y deben convivir con ellos. Es muy común comentarle un proyecto a un virginiano y recibir todo tipo de advertencia y comentario apocalíptico pero no lo hacen con mala intención, simplemente son detectores de errores humanos.
Poco diplomáticos: Los virginianos son sumamente sinceros y esto sin dudas es una virtud, exceptuando que suelen no tener tacto para decir las cosas que piensan y pueden ser muy hirientes en honor a la verdad. A veces alguien se acerca en busca de consejo y no saben medir el tono de sus opiniones y en lugar de consolar y contener, mortifican a quien acudió a ellos.
Obsesivos e intolerantes: El perfeccionismo de Virgo suele llegar a niveles extremos. No soportan que nadie altere el orden que establecen para sus cosas, cualquier error los saca de quicio y no permiten que nadie modifique la rutina que minuciosamente establecen en sus vidas. La falta de flexibilidad es un punto a mejorar para los virginianos.
Escépticos: Virgo es muy terrenal y por eso le cuesta admitir que ciertas cosas no puedan explicarse a través de los sentidos. Son incrédulos y desconfiados y a menudo pasan por alto cuestiones que tiene más que ver con la sensibilidad que con la lógica pura.